El diagnóstico de cáncer de mama es un momento que cambia la vida. Surgen miedos, incertidumbres, preguntas. ¿Qué tratamiento es el mejor? ¿Necesitaré quimioterapia? ¿Me quitarán la mama? ¿Podré reconstruirla? En medio de esa tormenta emocional, como cirujana especializada en cáncer de mama, mi mayor responsabilidad no es solo operar, sino ayudarte a decidir con conocimiento, calma y confianza.
En los últimos años, un enfoque ha cobrado una fuerza imparable en todo el mundo: la toma de decisiones compartida. No es una moda ni una tendencia. Es un cambio de paradigma que pone al paciente, a ti, en el centro del tratamiento. Porque no todos los cánceres de mama son iguales… y no todas las mujeres desean lo mismo.
¿Qué significa tomar decisiones compartidas?
Significa que, en vez de que la médica tome todas las decisiones por ti, trabajamos juntas. Yo aporto mi experiencia, el conocimiento médico, las evidencias científicas. Tú aportas tus prioridades, tus miedos, tu estilo de vida, tu forma de ver la vida.
No se trata solo de informarte, sino de escucharte de verdad. De explicarte todas las opciones —con sus ventajas y riesgos— y construir juntas un camino con sentido. Porque tú no eres “un caso más”: eres única.
¿Por qué es tan importante en el cáncer de mama?
Porque los tratamientos han evolucionado muchísimo. Hoy podemos optar por cirugía conservadora, mastectomía con reconstrucción inmediata, reconstrucción diferida, prótesis o tejidos propios. También existen diferencias en los tratamientos médicos: hay pacientes que se benefician de terapia hormonal, otras de quimioterapia o tratamientos biológicos.
Y aunque hay guías clínicas y recomendaciones, no existe una única respuesta correcta. A veces, dos opciones son igual de válidas desde el punto de vista médico. En esos casos, tu voz es la que debe marcar el rumbo.
Decidir juntas es cuidarte mejor
Estudios recientes han demostrado que las pacientes que participan activamente en las decisiones:
- Tienen menos ansiedad y más confianza en su tratamiento.
- Están más satisfechas con los resultados estéticos y funcionales.
- Cumplen mejor los tratamientos.
- Se sienten más seguras y acompañadas.
Como cirujana, creo firmemente que el mejor tratamiento no es el que impongo, sino el que elegimos juntas con información clara y respeto mutuo.
Un espacio donde tu voz importa
En mi consulta, como experta cirujana e investigadora internacional con más de 10 años de experiencia, siempre dedico el tiempo necesario para hablar, escuchar y construir contigo un plan personalizado. No importa cuántas preguntas traigas ni cuántas veces necesites repasar los detalles: tomar decisiones sobre tu cuerpo y tu salud es un acto de poder, no una obligación.
Mi compromiso contigo es que nunca te sientas sola, desinformada o presionada. Estoy aquí para ayudarte, orientarte y, sobre todo, para que sepas que cada paso lo damos juntas.